El Château d'Esclimont fue construido en 1543 por el arzobispo de Toursy y ha sido desde entonces hogar de la aristocracia, estadistas y políticos, principalmente a causa de su proximidad a París y Versalles. Hoy en día, se yergue dentro de un parque arbolado de 150 acres, rodeado de fosos y un estanque, el epítome perfecto del castillo francés. Los interiores son magníficos ejemplos de elegancia renacentista, donde lo viejo y lo nuevo coexisten armónicamente. Si está de visita en París, dése un tiempo para experimentar la serenidad y los mimos de Esclimont, situado a alrededor de una hora en coche al sur. La finca ofrece una amplia gama de instalaciones deportivas, entre las que se cuenta una piscina en el entorno más romántico que se pueda imaginar. El hotel ofrece una cocina tradicional de gran nivel y una bodega con una selección de más de 400 vinos, servidos en un magnífico comedor que le transportará a nuevas cotas de placer. Una experiencia inolvidable.
Cómo llegar: