Apacible hotel con encanto, reformado en 2006 emplazado en plena playa primorosa delicadeza que le permitirá aprovechar la grandeza de disfrutar de unos días familiares y tranquilos. Convenientemente equipadas, sus 148 habitaciones cuentan con teléfono, televisión, impresionantes vistas y baño completo. Esta elección será un regalo para nuestros sentidos por el elevado nivel de exigencia en la satisfacción de sus clientes. Podremos disfrutar de un relajante chapuzón en su piscina, posee unas interesantes zonas comunes en las que relajarnos y cuenta con un excelente servicio de restauración. Vive la paz en cada rincón, camina entre el silencio y llena tu estancia con recuerdos inolvidables. Tranquilidad sólo rota por el eco de tus pasos al recorrer las praderas.
Cómo llegar: