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Situada enfrente de la Puerta Aurea, una de las 4 puertas de la antigua Paestum, esta residencia rústica fue originalmente un granero que fue transformado posteriormente en un hotel. El hotel conserva su encanto antiguo y está inmerso en un ambiente tranquilo, ideal para la relajación. Desde algunas de sus 14 habitaciones elegantemente amuebladas y de diversos estilos, se pueden disfrutar vistas impresionantes de la ciudad antigua, mientras que de otras habitaciones se puede admirar el típico jardín mediterráneo con olivos, árboles frutales, acacias, pinos y adelfas. El desayuno se sirve en la amplia terraza con vistas a este verde jardín que rodea el hotel. El ambiente sencillo pero refinado y acogedor de la Sala Camino y el salón le invita a disfrutar de leer un libro, hablar con otros huéspedes o escuchar música.Automatische Übersetzung Original Text verfügbar in:
Situated opposite the Aurea Gate, one of the 4 gates to ancient Paestum, this rustic residence was originally an ancient granary that has been transformed into a hotel. The hotel preserves its former charm and is immersed in a tranquil atmosphere, ideal for relaxation. From some of its 14 rooms, furnished with remarkable taste and in different ways, you can enjoy impressive views of the ancient town, whilst from the other rooms you can admire the typical Mediterranean garden with olive trees, fruit-trees, acacia, pines and oleanders. Breakfast is served on the wide terrace overlooking this green garden surrounding the hotel. The plain, but refined and warm ambience of the Sala Camino and of the lounge invites you to enjoy reading a book, talk with other guests or listen to music. The hotel offers 14 spacious and comfortable rooms, all furnished with old family furniture. All rooms boast views over the garden, the temples or the court-yard.
Situada enfrente de la Puerta Aurea, una de las 4 puertas de la antigua Paestum, esta residencia rústica fue originalmente un granero que fue transformado posteriormente en un hotel. El hotel conserva su encanto antiguo y está inmerso en un ambiente tranquilo, ideal para la relajación. Desde algunas de sus 14 habitaciones elegantemente amuebladas y de diversos estilos, se pueden disfrutar vistas impresionantes de la ciudad antigua, mientras que de otras habitaciones se puede admirar el típico jardín mediterráneo con olivos, árboles frutales, acacias, pinos y adelfas. El desayuno se sirve en la amplia terraza con vistas a este verde jardín que rodea el hotel. El ambiente sencillo pero refinado y acogedor de la Sala Camino y el salón le invita a disfrutar de leer un libro, hablar con otros huéspedes o escuchar música.